Hace tiempo que quería hablaros de El Columpio (Caracas, 10) situado en el madrileño barrio de Chamberí y a escasos metros del restaurante italiano Fellina, del que ya os hablé hace tiempo aquí.
Decorado por Marta Banús, El Columpio destaca por su luminosidad y por su decoración minimalista en tonos pastel y aires mediterráneos, que se respira en cada rincón del establecimiento. Se divide en tres ambientes: por un lado, la zona de barra, de aire rústico, con utensilios y aperos tradicionales, mucha madera y vigas vistas en el techo. Por otro, el salón comedor y la barra de coctelería con aspecto más chic y sofisticado, de inspiración años 20 con lámparas retro, grandes espejos y sofás tapizados en terciopelo de colores intensos. Y para acabar, una zona chill out de ambiente más relajado e informal, como de chiringuito de playa.
Este acogedor restobar, abierto ininterrumpidamente desde la hora del desayuno hasta las copas, cuenta con una carta en la que destacan platos mediterráneos muy apetecibles y a buen precio. Me parece ideal para disfrutar de una buena conversación y platos deliciosos entre amigas en cualquier momento del día. ¡Ah! y como todos los restaurantes del grupo Le Cocó, es DogFriendly.
Nuestra comida comenzó con un poco de mantequilla, que te traen en un recipiente de madera gigante. ¡Una tentación ineludible!
Comenzamos con unos deliciosos entrantes: la ensaladilla rusa con bonito casero ¡muy recomendable!, los baos negros con langostinos, mayonesa de ají amarillo y hierbas ¡deliciosos!; y tentáculo de calamar. Deliciosos.
Yo me decanté por le tartar de atún con aguacate, que me encantó, aunque el salmón con cous-cous cítrico y los ravioli de trufa con salsa de boletus tenían una pinta espectacular.
Terminamos con unas deliciosas tartas caseras de zanahoria y oreo ¡espectaculares!, y un delicioso mojito. Apuntad la dirección porque no os arrepentiréis.
Tiene una pinta estupenda, me lo apunto para mi próxima visita.
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