Hace escasos días que finalizó la séptima edición de La Maison Lancôme, ubicado en el madrileño Palacio Carlos María Castro, un enclave único en el que la firma presentó sus novedades para este año. Me encantó visitar una vez más este mundo mágico con el que la maison francesa nos deleita cada año.
El recorrido comenzó en el loft, donde pudimos descansar y tomar algo en un espacio cuya decoración despertaba la envidia de cualquier apartamento urbano. Continuamos con una pequeña floristería cuyo lema Díselo con flores rendía homenaje a los principales pilares de la perfumería Lancôme: Aguas frescas, Trésor y, cómo no, La Vie Est Belle.
Tras él se abría paso la sala del chandelier, protagonizada por la nueva fragancia de la casa: La Vie Est Belle Éclat. Su frasco de cristal facetado y su jugo declinado en una versión más floral gracias al azahar, la bergamota y un bouquet de flores blancas, hará las delicias de las coleccionistas.
En la Sala "Love your Age", dedicada a la innovación, Lancôme dio a conocer bajo lema que "Cuanto más vivo, más joven me siento" sus novedades en tratamiento facial: Visionnaire Crescendo, Rénergie Multi-Lift Ultra y Advanced Genifique Sensitive.
La sala make up studio puso la guinda final al fastuoso pastel. En ella pudimos conocer el Teint Idole Ultra Wear con 19 tonos a partir de septiembre, Matte Shaker (ideal para las que amamos el efecto mate en los labios) y la nueva familia de productos con ÉL a la cabeza. ¿Y quién es ÉL? ÉL es Monsieur Big, la nueva máscara de pestañas de la marca. Junto a él, vienen también Monsieur Big Marker, un eyeliner; y Monsieur Big Brow, para llevar siempre las cejas impecables.
Poco a poco os iré contando las novedades que estoy probando pero, mientras tanto, os dejo algunas imágenes que ya formarán parte de la historia de la belleza Lancôme.
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