Algunos de mis protectores solares para este verano

Si hay un gesto de belleza imprescindible, sobre todo en verano, es utilizar protector solar. Aunque no debemos considerar al sol como un enemigo total, ya que también tiene efectos positivos para la salud: es un elemento esencial para la vida, ya que regula la actividad hormonal, el metabolismo y los biorritmos (los periodos de actividad y descanso), además es el elemento necesario para que el cuerpo sintetice la vitamina D, que es imprescindible para la absorción de calcio y magnesio en los huesos. Por eso es imprescindible exponerse al sol al menos 15 minutos al día. Lo que debemos tener en cuenta es que la exposición prolongada al sol sí es dañina para el organismo.

A corto plazo, la radiación ultravioleta de los rayos solares produce quemaduras. Se debe principalmente a los UVB, que penetran en la epidermis (la capa más superficial de la piel) y estimulan los melanocitos, las células de la piel. El cuerpo se defiende de esta agresión del sol mediante la melanogénesis, un proceso natural de la epidermis por el que se forma la melanina, que al oxidarse en las capas superiores de la piel le da ese pigmento oscuro típico del bronceado. La epidermis produce la melanina para proteger las capas más profundas de la piel de estas radiaciones ultravioletas.

¡Atención l@s que tenéis la piel clara! Porque éstas generan mucha menos melanina y están mucho más desprotegidas ante la acción de los rayos UVB. Y la exposición al sol les provoca quemaduras mucho antes que a una piel más oscura, así como eritemas, granitos y alergias solares. Suelen ser fotosensibles.

A largo plazo, la radiación ultravioleta de los rayos UVA produce un envejecimiento acumulativo de la piel porque penetra de manera más profunda en ella y llega a afectar a la capa basal, que es donde están situadas las células regeneradoras y los melanocitos. Esto significa que su acción puede llegar a modificar el ADN de las células de la dermis y a producir cambios en la estructura química del colágeno, de la elastina, así como en la cantidad y calidad de proteínas y ácidos grasos naturales de la piel. Las consecuencias pueden ser graves, como la aparición de cáncer de piel.

Para evitar los problemas para la piel que conllevan los baños de sol prolongados, y beneficiarnos de sus virtudes, os traigo algunos protectores solares muy recomendables. Aunque también es muy importante es elegir el índice de protección solar adecuado a cada piel y al tiempo de exposición, lo explico aquí.

Las primeras novedades de que os traigo son de Eucerin, concretamente de su línea Sun Protection, que nos sorprende con la incorporación de un ingrediente muy novedoso: el Licocalcón, un antioxidante de origen natural con el que es posible conseguir una protección tridimensional, llegando a las capas más profundas de la piel protegiendo las células frente a los radicales libres inducidos por la radiación solar. 

Os encantaran los fluidos faciales matificantes SPF 30 Y SPF 50+, especialmente indicados para ofrecer una óptima protección solar del rostro. Además Licocalcón A (protector DNA celular), contiene y Ácido Glicerritínico (reparador del DNA dañado por el sol). Son fórmulas altamente resistentes al agua y sin perfumes añadidos. Aunque se adapta a todos los tipos de piel, es especialmente recomendable para la piel normal/mixta o piel acnéica.

¿Lo mejor? Que incorporan siliconas en su formulación y contiene polímeros con propiedades de absorción del aceite que aportan un aspecto matificado y una sensación de piel fresca y seca, sin brillos ni marcas blancas ¡una maravilla! PVPR: 16 €.

Para los que preferís texturas transparentes seguro que os convencerá el Spray Transparente Corporal de Eucerin contiene fórmulas altamente resistentes al agua y texturas de última generación que facilitan su absorción en la piel sin dejar residuos. Esto se cosigue gracias a su textura ligera y sedosa. Es el producto perfecto para conseguir una aplicación más eficiente y una dosificación más regular y homogénea ¡muy cómoda para la piel con vello! PVPR: sun spray transparente spf 30 18 €/sun spray transparente spf 50+ 20 €.

Si lo que preferís es el formato en crema podéis optar por una loción extra light nada pegagosa. ¡Os va a encantar!

De nuevo pensando en los que prefieren texturas transparentes, Bioderma Photoderm Bruma Solar Invisible con protección 30 o 50, invisibles, sin alcohol, sin parabenes, e hipoalergénicas ¡y perfectas para pieles sensibles! Deja la piel suave satinada y se absorbe de inmediato sin dejar la piel pegajosa. ¡Y sirve para proteger también el rostro y el cabello!

Incluye, como todos los productos de la marca,  la patente BIOprotección celular que previene el fotoenvejecimiento cutáneo y el helioderma (protección del ADN de la piel). También protege las células de Langerhans (célula estrellada de la piel encargada de la defensa inmunitaria y localizada en la epidermis. Al ser capaz de migrar, su papel consiste en alertar a las demás células inmunitarias de la intrusión de una molécula o cuerpo extraño, pero con el sol se pueden dañar), y activa las defensas cutáneas frente a los rayos UV.

También contiene un complejo que estimulador de la melanogénesis que permite lograr  un moreno natural, seguro y duradero. SPF 30 16,90 euros y SPF 50  19,90 €.

Otra de las novedades de este año es de Lierac, en concreto el aceite seco bronceador Sunific SPF 30 (también disponible en SPF 15 y SPF 6). En él se combina un sistema de filtros de amplio espectro anti-UVA/UVB de alta tolerancia y fotoestables, que incluyen un complejo anti-edad/activador de bronceado y un cocktail de 3 aceites hidratantes bronceadores. Os hablé de él aquí. ¡Uno de mis productos favoritos del verano! PVPR 125 ml: 29 €.

Para preparar, proteger y activar las pieles más claras y sensibles para el bronceado he elegido Oenobiol solaire intensif nutriprotección. Es la nutricosmética perfecta para personas con piel clara y sensible, que sufren reacciones al sol, se queman enseguida, pero no quieren renunciar a un bronceado saludable. Oenobiol solaire intensif nutriprotección les permite obtenerlo sin rechazos y con un plus de protección celular antioxidante.

Su fórmula ayuda también a enfrentarse al sol a las pieles poco maduras, como las de los niños, que pueden tomarlas en días alternos para mejorar sus defensas naturales contra la radiación.

Protege de la radiación solar y de los radicales libres, responsables del envejecimiento celular. Con una reducción en la incidencia de reacciones de intolerancia al sol de un 94%, ayuda a preparar, proteger y activar las pieles más claras y sensibles para el bronceado.

Lo hace gracias a una fórmula especialmente desarrollada para pieles claras basada en el Actilycopeno, la luteína, el selenio, la vitamina E y el escudo de protección que crea Nutriflitre, una combinación exclusiva de Oenobiol Paris con fitoenos y fitofluenos que aumenta las defensas de la piel para recibir la radiación solar.

Esa fórmula fortalecedora estimula la tolerancia natural de la piel y ayuda a que se produzca la melanogénesis de una forma natural. Además, no solo protege de la radiación y de los radicales libre, también reduce considerablemente la incidencia de las reacciones de intolerancia al sol.

¿Cómo tomarlo? Hay que preparar la piel tomando una cápsula diaria en una comida durante cuatro semanas. Cuando empiece el periodo de exposición al sol hay que seguir tomando una cápsula al día y se puede alargar esta toma durante otros 15 días si se desea alargar el bronceado. PVPR caja con 30 cápsulas: 25, 50€. ¿Ya habéis elegido vuestros protectores solares para este verano?

No te pierdas mi intervención en el programa Edición Limitada de Gestiona Radio (12:45 aprox.) aquí y aquí donde cuento más trucos y amplio información.