Hablando de Hunter…

No os he contado que mi última adquisición ‘hunteriana’ es perfecta para el verano. Sí como lo oís, y os prometo que no iré con botas de agua a 40 grados. Se trata de las sandalias Hunter, que se han convertido en una de las piezas imprescindibles de mi fondo de armario estival.

¿Un aperitivo en la playa? ¿Una barbacoa la borde de la piscina? ¿Un chaparrón veraniego? Las sandalias Hunter son la solución perfecta. Os aseguro que en lo que llevamos de verano ya me han sacado de más de un aprieto.

Como podéis ver, la legendaria firma inglesa se reinventa con audaces sandalias veraniegas realizados en PVC. ¡Ya no hay excusa para que Hunter no sea un referente de cualquier fondo de armario durante todo el año!

Sus tres nuevos modelos de sandalias elegantes, atemporales, con hormas ligeras y adaptables a cualquier outfit veraniego, están disponibles en colores neutros (blanco, negro y camel). El logo también se renueva, en esta ocasión transformándose en un medallón metálico con la inconfundible “H” en el centro, o impreso en tamaño maxi en la planta de las sandalias.

Yo ya os enseñé las mías en twitter, son de la colección Southwell, que recrea el estilo gladiador, reinventando la eterna tendencia romana con una creación perfecta para cualquier momento del día gracias a sus líneas puras, perfectas para combinar durante el día o la noche. PVPR: 99 €. ¡Me encantan!

Las flip-flop de la colección Edgecomb, son el complemento imprescindible de cualquier estilismo playero al que queramos aportar un complemento único. PVPR: 85 €.

Mildford es la creación más clásica que no puede faltar en el guardarropa veraniego. Me parecen ideales para combinar con cualquier look y aportar un toque original a cualquier estilismo en tonos neutros y un material singular, cómodo y duradero. PVPR: 95 €.